Ha pasado un año desde que la IAGen irrumpió en escena, y para quien pensara que esto sería algo pasajero, la tecnología está creciendo a una velocidad vertiginosa, adquiriendo nuevos usos y cambiando la forma en que vivimos y trabajamos. Las relaciones públicas no son la excepción.
Mucho se ha discutido sobre cuantas funciones dentro de la comunicación corporativa desaparecerán o al menos se alterarán a raíz del fenómeno de la IAGen. En algunos casos se ve muy clara, como por ejemplo la creación de contenidos, sin embargo, el relacionamiento personal, la creatividad y el manejo de crisis parece, hasta el momento, que no se ven amenazadas.
Una encuesta realizada por The Conference Board revela nuevos conocimientos sobre cómo los comunicadores y especialistas en marketing continúan superando los límites de la IA y descubriendo nuevas formas de incorporarla en los flujos de trabajo.
El 68 por ciento de los comunicadores utiliza la IA al menos ocasionalmente, aunque sólo el 18 por ciento la utiliza con frecuencia o todo el tiempo. En cuanto al uso principal de la herramienta, 38 por ciento de los especialistas en marketing y el 49 por ciento de los comunicadores recurren a ella para editar, normalmente durante la última etapa de un proyecto.
De esta manera, los especialistas en marketing y comunicadores se están convirtiendo en editores de contenido generado por máquinas para mejorar la producción creativa y garantizar la precisión y relevancia. “La IA, en particular la IAGen, libera tiempo y espacio mental de los creativos para trabajos de mayor valor y puede inspirar ideas”, según el informe.
La capacidad de crear contenido original hace que la IAGen sea útil en una amplia gama de aplicaciones, incluida la escritura creativa, chatbots automatizados, asistencia virtual, sistemas de recomendación e incluso comunicación de crisis.
Una de las actividades que ha integrado a la IA de una manera valiosa y complementaria, es precisamente la gestión de crisis, mejorando significativamente las capacidades predictivas.
Permite la identificación temprana de riesgos antes de que se conviertan en una crisis de mayores proporciones.
Más allá de la predicción, la IA también desempeña un papel fundamental en la gestión de crisis en curso, a través del análisis de datos en tiempo real y el apoyo a la toma de decisiones. Ello resulta en estrategias de respuesta rápida, garantizando que las inquietudes y preocupaciones del público se aborden de manera oportuna.
Aprovechar la IA generativa para la comunicación de crisis también garantiza mensajes consistentes y precisos en todas las plataformas y una mayor participación y satisfacción de las partes interesadas, al tiempo que proporciona una solución rentable para la comunicación de crisis.
La tecnología también permite que las organizaciones estén mejor preparadas para las crisis al proporcionar alertas automatizadas y oportunidades para simulación y capacitación de crisis. Al adoptar esta tecnología, empresas de todos los tamaños pueden afrontar crisis con agilidad, mantener su reputación y construir relaciones más sólidas con sus clientes y sus públicos de interés.
En esencia, aprovechar el poder de la IA para la gestión de crisis podría ser clave para mejorar la resiliencia organizacional en un mundo incierto. El futuro promete aún más posibilidades a medida que continuamos explorando las aplicaciones potenciales de esta tecnología transformadora.
Si bien la IAGen ofrece un enorme potencial en eficiencia y escalabilidad, también presenta un cambio sustancial en los roles y habilidades requeridos dentro de la industria. Los profesionales de la comunicación deben evolucionar desde creadores de contenido tradicionales hasta editores expertos, estrategas y guardianes éticos del contenido generado por IA.
