En la era de la información, donde cada decisión de consumo se basa en datos, reseñas y recomendaciones, el marketing emerge como una herramienta poderosa para transformar la percepción y comportamiento del consumidor. En el ámbito financiero, especialmente en el sector de inversiones, el marketing juega un papel crucial para educar, informar y motivar a más personas a invertir.
El panorama actual de las inversiones en México, según la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2021, revela que seis de cada diez personas en México ahorran, pero una proporción significativa lo hace en instrumentos informales. Además, el 54.1% de las personas entre 18 y 70 años ahorran de manera informal. Estos datos reflejan una oportunidad inmensa para las instituciones financieras de utilizar estrategias de marketing efectivas para cambiar esta tendencia.
El marketing, al ser una herramienta de comunicación y persuasión, puede ser utilizado para:
1. Educar al Consumidor: A través de campañas informativas, se puede enseñar a la población sobre la importancia de invertir, los beneficios a largo plazo y cómo las inversiones pueden proteger y crecer su dinero frente a la inflación.
2. Desmitificar las Inversiones: Muchas personas no invierten porque lo ven como algo complejo o riesgoso. El marketing puede ayudar a desmitificar este concepto, mostrando que cualquier persona puede ser un inversionista, independientemente de su conocimiento previo.
3. Promover Plataformas Digitales: El inversionista moderno utiliza plataformas digitales y aplicaciones móviles para monitorear sus inversiones. Promocionar estas herramientas puede atraer a un público más joven y tecnológicamente hábil.
4. Resaltar Testimonios Reales: Las historias de éxito de otros inversionistas pueden ser una herramienta poderosa para inspirar confianza y motivar a más personas a dar el paso.
5. Personalizar la Experiencia: Con la ayuda de la analítica, las instituciones pueden ofrecer productos y servicios adaptados a las necesidades individuales de cada cliente, haciendo que la experiencia de inversión sea más atractiva.
Un ejemplo en el mercado mexicano es GBM, que con su campaña “GBM. Donde México invierte”, busca democratizar el acceso a las inversiones y desmitificar el tema para millones que aún no invierten.
En un país donde la cultura de inversión aún está en desarrollo, el marketing se presenta como una herramienta esencial para impulsar a más mexicanos a invertir. Las instituciones financieras deben aprovechar este recurso para educar, inspirar confianza y mostrar que invertir es una decisión inteligente y accesible para todos.